Ahora, el poeta eres tú.

Al final de la tarea, escribirás un poema. Pero antes deberás realizar varias actividades sencillas que te servirán para redactar tu texto en las que practicarás lo aprendido en este tema:

La primera parte de la tarea consiste en explorar el mundo de los sentimientos y las emociones.

En primer lugar, realiza una lista con todos los sentimientos que se te ocurran, y a continuación busca algún elemento físico que identifique a esas emociones, como en el siguiente ejemplo:

En segundo lugar, despierta tu imaginación para construir un caligrama. Recuerda que se trata de un texto en el que las palabras deben estar colocadas de forma que formen una imagen. Debes utilizar alguno de los elementos que has utilizado en el ejercicio anterior. No olvides repasar el apartado correspondiente del tema para inspirarte.

Hemos visto en el tema la importante relación que existe entre música y poesía. En este ejercicio debes copiar la letra de alguna canción que te guste y que te parezca poética. Como imaginas, debe estar en español.

En este ejercicio vamos a practicar la medida de los versos. Repasa el apartado "Con regla y compás" para recordar lo referente a la compensación métrica y a la sinalefa.

Vamos a construir un haiku. ¿Que qué es? Se trata de un poema muy breve de origen japonés que se compone de diecisiete sílabas repartidas en tres versos sin rima.

• El primer verso debe tener cinco sílabas.
• El segundo, tendrá siete sílabas
• El tercer verso tiene cinco sílabas.

Cuando lo hayas escrito, comprueba que lo has hecho correctamente con este contador de sílabas.

Lee para inspirarte los siguientes ejemplos:

En esta parte de la tarea, aprenderemos a buscar palabras que rimen.

Haz una lista con diez palabras que te gustaría utilizar en tu poema.

Para cada una de ellas, busca tres palabras que rimen, ya sea en asonante o en consonante.

Puedes ayudarte con el siguiente diccionario de rimas.

Ejemplo:

Ahora practicaremos un par de recursos estilísticos.

Utiliza las parejas de palabras de la actividad 1 para construir símiles o metáforas:

Ejemplo:

Y se acaba el calentamiento. Ahora, ¡a jugar! Ya estamos preparados para ponernos manos a la obra en la redacción de un poema. Puedes aprovechar lo que has practicado en los ejercicios anteriores.

También puedes utilizar los siguientes consejos:

1. Decide qué sentimientos o emociones quieres transmitir en tu poema. Puedes utilizar alguna de las que has utilizado en el primer ejercicio.

2. Decide también con qué elementos vas a comparar o identificar ese sentimiento.

3. Elige un tipo de poema que te guste. Lo más sencillo será, sin duda, el verso libre, ya que no tendrás que contar las sílabas de cada verso ni controlar la rima. Pero si quieres trabajar un poco más, puedes atreverte con un soneto o un romance.

4. Y ahora, deja fluir la imaginación. No olvides utilizar algunos recursos estilísticos, como la metáfora, la anáfora o la personificación.

5. Finalmente, comprueba la ortografía y la corrección de tu texto.