8.3.1. La ciudad como sistema.

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«Cada centro urbano se comporta como un sistema solar, agrupa alrededor sus planetas y, a su vez, forma parte de un sistema superior».

J. BEAUJEAU, Tratado de Geografía Urbana.

Curiosa imagen, ¿verdad? Representa de un modo esquemático la frase que abre este apartado, y trata de reflejar la distribución en el espacio de una serie de ciudades organizadas en un sistema de jerarquía. De la ciudad principal, (punto rojo), dependen una serie de ciudades menores (puntos azules), de las que, a su vez, dependen otras ciudades aun menores (puntos amarillos).

A este tipo de relaciones de dependencia entre ciudades nos referimos cuando hablamos de sistemas urbanos.

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Las ciudades no pueden estudiarse aisladamente, ya que son elementos básicos en la organización territorial de una región o un Estado.

Las relaciones que se establecen entre las ciudades de un sistema urbano dependen básicamente de dos aspectos:

De las funciones que desarrolla cada ciudad en su zona de influencia.

De la jerarquía que se establece en función del número de habitantes de cada ciudad.

Veamos un par de ejemplos prácticos para que comprendas mejor la importancia de las funciones urbanas dentro de un sistema urbano.

Si tomamos como ejemplo la función educativa, una ciudad universitaria cuenta con un distrito, más o menos amplio, que depende de ella. Dentro de ese distrito pueden existir otras ciudades que carecen de universidad, y que en este tema serían dependientes de la ciudad principal. Recuerda que no todas las ciudades disponen de todas las funciones urbanas a gran escala.

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Vínculos entre localidades andaluzas en cuanto a Enseñanza Secundaria y Superior

 

Las líneas unen las localidades entre las que existen vínculos de dependencia en Enseñanza Secundaria y Universitaria. Cuantas más líneas llegan a una ciudad, y desde más lejos, mayor es su influencia y su radio de acción en el sistema urbano analizado.

Modelo de jerarquía urbana
Imagen en iesgrancapitan.org
Sin duda, es en el terreno de la economía en el que más puede aplicarse el concepto de sistema urbano, ya que las ciudades mayores reciben y producen bienes y actúan como puntos de distribución. Los bienes y servicios que pueden encontrarse en las grandes ciudades se distribuyen a las de tamaño medio, que a su vez los distribuyen a las menores. A veces tenemos que desplazarnos de nuestra ciudad a otra cercana más importante para acceder a determinados servicios. A mí me pasa, por ejemplo. Vivo en Granada, que es una ciudad importante, pero determinadas cadenas comerciales no tienen establecimientos en Granada y a veces tengo que ir a Málaga o Sevilla si quiero comprar sus productos (piensa en una gran cadena de muebles...)
Y en cuanto a la jerarquía de ciudades la cuestión es bien sencilla. Diferenciamos varios rangos de ciudad según tengan más o menos habitantes.

Podemos establecer la siguiente jerarquía dentro de un sistema urbano:

Las metrópolis nacionales (más de 1 millón de habitantes). Son grandes ciudades que extienden su área de influencia sobre gran parte del territorio nacional, y a su vez se encuentran relacionadas con otras grandes ciudades a escala mundial. Poseen la totalidad de funciones urbanas y a gran escala, incluso algunas en exclusiva, como la función político-administrativa de capital de Estado que tiene Madrid. Estas ciudades son verdaderas aglomeraciones urbanas, porque engloban a las ciudades de su entorno.

En España sólo Madrid y Barcelona tienen rango de metrópolis nacional ¿Has notado que los dos grandes clubes de fútbol de Madrid y Barcelona tienen miles de seguidores en toda España? Ahí tienes un ejemplo claro de que estas ciudades tienen influencia sobre todo el territorio nacional. Bueno, en el terreno económico su influencia es más importante, pero tal vez eso lo notes menos.

Mapa de carreteras de Madrid
Imagen en netmaps.net

La ciudad de Madrid irradia su influencia sobre toda España. Se nota mucho, por ejemplo, en la organización de la red de carreteras del Estado.

Las metrópolis regionales de primer orden (de 300.000 a 1 millón de habitantes). Son ciudades que ejercen su influencia sobre una región amplia, superior a su propia provincia. Mantienen relaciones con otras ciudades de rango nacional, por ejemplo, vuelos directos entre ellas. Sus funciones principales son las industriales, comerciales y culturales. Pueden ser capitales autonómicas, en cuyo caso son centros de servicios administrativos y los principales núcleos económicos de sus respectivas Comunidades.

En el caso de España pertenecen a este rango, por orden de habitantes: Valencia, Sevilla, Zaragoza, Málaga, Murcia, Palma de Mallorca, Las Palmas de Gran Canaria, Bilbao, Córdoba, Alicante y Valladolid.

Málaga
Imagen en Wikimedia Commons de Tyk bajo C

Málaga, aunque no es capital autonómica, es una metrópolis regional de primer orden, como Sevilla.


Las metrópolis regionales de segundo orden (de 200.000 a 300.000 habitantes). Son ciudades que ofrecen servicios menos variados, pero que pueden ser de gran importancia en algunos casos y afectan a un territorio a veces superior a su propia provincia. Suele tratarse de capitales provinciales, aunque en aspectos concretos su influencia llega hasta las provincias cercanas, como sucede en Granada respecto a su Universidad. Otras veces estas ciudades no son capitales de sus provincias, pero han crecido mucho por diversos motivos (actividades industriales o portuarias, zonas de vivienda para gente que trabaja en la capital de la provincia...)

En el caso de España pertenecen a este rango Vigo, Gijón, Hospitalet, La Coruña, Granada, Vitoria, Elche, Santa Cruz de Tenerife, Oviedo, Badalona, Cartagena, Móstoles, Jerez de la Frontera y alguna más.
 
Jerez de la Frontera
Imagen en Wikimedia Commons de El Pantera bajo CC 
 
Jerez de la Frontera es una de las metrópolis regionales de segundo orden que hay en Andalucía
Las ciudades intermedias (de 50.000 a 200.000 habitantes). Suele tratarse de capitales de provincias poco pobladas. Tienen funciones principalmente administrativas y comerciales, pero menos especializadas. Pueden presentar alguna especialización en educación, sanidad, comercio,... Algunas de ellas han crecido debido a su evolución como centros industriales de sus provincias. Normalmente su ámbito de influencia no pasa de su propia provincia.

En España pertenecen a esta categoría todas las capitales provinciales que no se han mencionado con anterioridad y muchas otras ciudades que no son capitales provinciales.

 

Jaén
Imagen en Flickr de Airon Zone bajo CC

Jaén es una de las ciudades intermedias que hay en Andalucía.

Las ciudades pequeñas (de 10.000 a 50.000 habitantes). Estas ciudades suelen prestar servicios a una comarca no muy extensa, aunque son importantes centros de transporte para su zona. Por ejemplo, pueden tener líneas de tren o autobuses que comunican a la zona con ciudades más importantes. En algunos casos estas ciudades tienen algunos rasgos rurales. Por ejemplo, hay una importante presencia de actividades económicas del sector primario (agricultura y ganadería). ¿Recuerdas que el bloque anterior hablamos de agrociudades? Pues estarían en este grupo.

 

 Ronda
Imagen en Flickr de Chodaboy bajo CC

Ronda, con sus 36.000 habitantes, sería un buen ejemplo de agrociudad

Icono de iDevice Actividad de Espacios en Blanco

Autoevaluación.

Coloca el número que le corresponde a cada definición.

1. Metrópolis nacional.
2. Metrópolis regional de primer orden.
3. Metrópolis regional de segundo orden.
4. Ciudad intermedia.
5. Ciudad pequeña

 

a. Tiene más de 300.000 habitantes y suele ser capital autonómica

b. Tiene menos de 200.000 habitantes y suele ser capital de una provincia poco poblada

c. Tiene más de 1 millón de habitantes y su área de influencia es de carácter nacional

d. Tiene menos de 50.000 habitantes y un importante peso de actividades económicas relacionadas con la agricultura y la ganadería

e. Tiene más de 200.000 habitantes y en algunos aspectos su influencia llega hasta las provincias cercanas