Orientaciones sobre la Introducción

La Introducción de la WebQuest: andamiaje (también cognitivo) del proyecto

Es evidente que, si debemos cumplir con todos los aspectos que hemos indicado, resulta complicado hacer una buena Introducción, dado que con pocas palabras debemos motivar al alumnado, centrar su punto de vista, introducir el tema de forma que se sientan vinculados a un contenido, hacerles comprender qué puede llegar a aprender... Sin embargo, es una de las partes más importantes del diseño de la WebQuest, el banderín de enganche que determina en una gran medida que nuestra propuesta funcione bien o no. Por eso, es uno de los Rubicones que debemos franquear exitosamente para crear una buena WebQuest. A veces, es cuestión de creatividad. Y, por qué no decirlo, el apartado que da sentido al conjunto de la WebQuest.

 
public investigation


Para comenzar a diseñar una Introducción

Normalmente, al proponernos hacer una WebQuest tenemos una idea del tema a desarrollar, del trabajo que queremos que el alumno haga. Es un primer paso importante, pero no suficiente. Debemos dedicar un rato a pensar en posibles planteamientos respecto a dicho tema; incluso diseñar varias posiblidades, varias posibles introducciones; analizar si serán motivadoras, viables, si nos permitirán articular a su alrededor gran parte de los contenidos que queremos que el estudiante aprenda, posibles problemas que suscitan... Y, evidentemente, deberemos retocar la Introducción cuando el resto de los apartados de la WebQuest estén ya elaborados (de hecho, algunos expertos en WebQuest aconsejan que no sea éste el primer apartado que se realice en el diseño de una WebQuest).


Un segundo consejo

Entre otras indudables ventajas, Internet está promoviendo una construcción colectiva del conocimiento: las ideas se difunden, se cuestionan y debaten, se pulen, se mejoran, se llega a nuevos consensos que a su vez sirven para reiniciar ese proceso dialéctico.
No lo decimos sólo como una reflexión genérica, sino como una propuesta de trabajo: de cara a la elaboración de una WebQuest, no hay mejor consejo que... buscar una ya hecha, tomar de ella buenas ideas o analizar qué características de la misma nos parece necesario evitar. Hablamos por tanto de mejorar WebQuest, de valernos de la nómina (afortunadamente cada vez más numerosa) de dichas actividades ya existentes en Internet, para construir la nuestra, para aportar nuestra mejora a ese proceso de provisión de buenos recursos de aprendizaje a través de Internet (y difundidos desde Internet).
Una de las cuestiones que debes considerar en tu horizonte de trabajo (tal vez no para tu primera WebQuest, para aprender el proceso de su elaboración) es la de adaptar WebQuest ya realizadas. Un artículo de Bernie Dodge, el padre del modelo junto a Tom March, analiza las posibilidades de esta estrategia:

Adapting and Enhancing Existing WebQuests (en inglés; para una traducción automática al español, clic aquí)